Los  jacuzzis de madera para uso al aire libre, originales de la cultura japonesa y creados para la relajación y el disfrute. Para los japoneses el baño no constituye una rutina diaria de aseo solamente, sino un ritual para combatir el stress y para el disfrute. El baño de aseo se realiza afuera y ya limpios entran en el agua caliente a relajarse, preferiblemente acompañados; incluso toda la familia si el jacuzzi es lo suficientemente amplio.

Acompañado de un ambiente de luz tenue, velas aromáticas y una música acorde a los gustos del usuario, lo convierten en una experiencia agradable que se complementa con un entorno natural.

La bañera japonesa es tan importante para los asiáticos que existen textos documentales que narran la estrecha relación que hay entre el budismo zen y las bañeras japonesas con fines de mejorar la meditación.